nosomoshistoria.com - Marcel Mangel fue un mimo y actor francés. Nace el 22 de Marzo de 1923 en Estrasburgo, y muere 84 años después, también un 22 pero de Septiembre en Cahors, Francia.
Su padre era un carnicero judío, quien fue arrestado por la Gestapo y deportado al campo de concentración de Auschwitz. Marcel y su hermano, Alain, decidieron adoptar el apellido de Marceau para ocultar sus orígenes judíos.
Siendo un gran admirador de Chaplin, a los 5 años lo vio en un filme y comenzó a imitarlo en casa. Inspirado en la actuación, cuando terminó la Segunda Guerra Mundial comenzó a estudiar arte dramático en el teatro de Sarah Bernhardt de París, y sus maestros al darse cuenta de su gran talento le dieron el rol de Arlequín en la pantomima Baptiste.
La actuación de Marcel fue muy aclamada, y eso lo incentivó a presentar su primer mimodrama llamado Praxitele and the Golden Fish, en el teatro Bernhardt. Entre otras actividades resaltantes Marcel Marceau creó en 1947 a Bip, el payaso con un suéter a rayas, de anchos pantalones y con un maltratado sombrero de copa decorado con una flor (que representaba la fragilidad de la vida) y que se convirtió en su alter ego, similar al vagabundo de Chaplin. Fue el mayor éxito de la temporada teatral 1955-1956 en Nueva York, y desde entonces se hizo giras por las grandes ciudades del mundo. Él no necesitó palabras para traspasar las fronteras.
En el cine trabajó con el director Roger Vadim en 'Barbarella' (1968) y con Mel Brooks en 'La Derniére folie' (1976), contribuyendo más a su fama internacional.
En 1978 creó en París una escuela de mimo en la que enseñaba la gramática de éste arte para perpetuar el relevo.
A lo largo de su carrera de más de 50 años, pudo abarcar muchas emociones humanas en diferentes escenarios, y sabemos que hoy está vigente, solo para dar algunos ejemplos existen muchos aprendizajes no-verbales, sobretodo en los juegos de expresión corporal como manos pintadas, pies expresivos, gestos, entre otros, y es para que los seres humanos podamos entender que hay otras maneras de comunicarse. El gran Marcel Marceau decía: "Las palabras no solamente pueden esconderlo casi todo, sino que en muchos casos sencillamente dicen muy poco". Por eso es bueno recordarlo hoy.
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